La Asociación decana de la pesca recreativa sostenible y la conservación de los ríos en España, con el apoyo de plataformas de pescadores asturianos, ha recurrido ante los tribunales la normativa que regula la pesca fluvial en el Principado de Asturias en 2020 [nota al pie 1] por despreciar los principios básicos imprescindibles para asegurar la supervivencia del rey de los ríos, incumpliendo la propia legislación autonómica.

Las poblaciones de salmón atlántico (Salmo salar), el pez más emblemático que aún puebla algunos ríos asturianos y peninsulares, sufren un severo declive. El salmón ha perdido casi el 70% de su hábitat original en nuestros ríos durante el pasado siglo y, además, en aquellos donde sobrevive su abundancia se ha visto reducida a menos de la quinta parte en las últimas décadas. Aparte de la reducción y alteración de su hábitat, el salmón soporta, particularmente en Asturias, una enorme presión por sobrepesca en los ríos. De manera injustificada e incomprensible, buena parte de los mejores reproductores que remontan los cursos fluviales asturianos se siguen capturando y sacrificando antes de que lleguen a desovar ni una vez. Esto convierte a la pesca recreativa en otra de las principales causas del imparable declive de las poblaciones salmoneras.

La Ley autonómica que regula la pesca en las aguas continentales de Asturias [nota al pie 2], vigente desde 2002, establece la obligación de «conservación y mejora para el disfrute de generaciones venideras del salmón atlántico» como uno de sus principales recursos. Es obvio que este no ha sido el objetivo de la política y la gestión de pesca fluvial de los sucesivos gobiernos asturianos. 18 años después de promulgarse, aún no se han redactado los principales instrumentos de planificación previstos en dicha Ley: el Plan de ordenación de los recursos acuáticos continentales, y los planes técnicos de gestión para cada especie, por supuesto también para el salmón. Estos serían los documentos básicos para “la preservación, y en su caso la recuperación de los ecosistemas acuáticos continentales” y para la gestión de la pesca “ecológica, integral y sostenible” que establece la Ley regional.

Los hechos muestran que el actual Gobierno del Principado sigue practicando el mismo inmovilismo de sus antecesores: ignora e incumple sus obligaciones legales, con una política de pesca fluvial fosilizada desde hace varias décadas. Las normas anuales se redactan sin base científica que las justifique, pues ni existen los planes preceptivos mencionados ni se realizan estudios e inventarios que puedan considerarse como tales. Ajeno al avance de su propia legislación, la única política de gestión de la pesca fluvial que sigue aplicando el Principado son unos programas de repoblación masiva basados en la extracción de reproductores del río, tan caros como ineficaces, que no solo se han demostrado totalmente incapaces de reponer los peces sacrificados a la pesca extractiva, sino que encimaperjudican la conservación de las poblaciones salvajes, ya que la mejor repoblación es la natural.

En suma: la gestión de la pesca fluvial en Asturias sigue impávida ante el continuo declive del salmón, incumpliendo sus obligaciones legales, huyendo hacia adelante con unos cupos de captura injustificables que en la práctica no limitan el sacrificio de salmones, aplicando tercamente las mismas recetas trasnochadas e ignorando clamorosamente el conocimiento científico.

Aunque la temporada de pesca del salmón de 2020 ya ha pasado, el contencioso sigue su curso y el dictamen del tribunal podrá afectar a la futura normativa de pesca. A la espera de la resolución judicial, Ríos con Vida, entidad Premio Nacional de Medio Ambiente, exige al Gobierno del Principado de Asturias que cumpla su propia Ley de pesca autonómica. Es urgente desarrollar los estudios hidrobiológicos y los instrumentos de ordenación y planificación legalmente establecidos que proporcionen un conocimiento real y objetivo de las poblaciones salmoneras y el estado de su hábitat. Mientras tanto, y respetando el elemental principio de precaución, se han de cambiar sin dilación los fundamentos de la actual normativa de pesca, basada en la práctica generalizada de la pesca extractiva, aplicándose todas las medidas necesarias para garantizar la conservación y recuperación del salmón atlántico y, de paso, también de las demás especies autóctonas que pueblan los ríos asturianos.

Gráfica representando el número de salmones capturados y sacrificados anualmente en los ríos asturianos desde 1949 hasta 2018 –línea azul-, incluyendo la mediana proyectada –línea roja-, apuntando el virtual agotamiento de las capturas en torno a 2030. Fuente: La Voz de Asturias. 03/09/2019: Salvar el salmón asturiano.

1. Resolución de 23 de octubre de 2019, de la Consejería de Desarrollo Rural, Agroganadería y Pesca, por la que se aprueban las normas para el ejercicio de la pesca en aguas continentales del Principado de Asturias durante la campaña 2020. http://pescafluvialasturias.es/pdf/normas_anuales_pesca.pdf

2. Ley del Principado de Asturias 6/2002, de 18 de junio, sobre protección de los ecosistemas acuáticos y de regulación de la pesca en aguas continentales. http://pescafluvialasturias.es/pdf/ley_pesca_6_2002.pdf

FOTO DE CABECERA: salmones reproductores en un río asturiano. AUTOR: David Álvarez